La garra, un poco sucia, con "grasa de las capitales" como diria Charly G., se ostenta en un rincon del estadio. Enorme, tremenda, organica.
Va cayendo gente al baile, y nuestro amigo, se empieza a acomodar.
95.000 fueron los que cayeron al baile. El Pajaro nunca vio tanta gente junta. Un recital de primera, aunque con algun "inconveniente" politico para gusto de nuestro amigo, siempre tan de izquierda (pero de la de en serio). Bono dedico "Beautiful day" a "the men and women who died serving this country", que, claro, no es el suyo (ni el del Pajaro, por cierto), porque parece olvidar que los irlandeses pasaron buena parte de su historia bajo la hegemonia del imperio britanico y ahora se siente fascinado por este imperio sin colonias. Comentarios politicos (mas o menos) al margen (no es facil de sobrellevar), el concierto fue impresionante.
Con la garra mas cerca y la pantalla en accion. A estas alturas, deshidratado ademas.
Ya casi arranca, ya casi arranca. U2 no es una banda, es una corporacion que mueve mucha gente, muchisima tecnologia y demasiadas (y muy light) causas por el bien de la humanidad. Pasearon por sus grandes exitos, al Pajaro le gusto mucho el espectaculo.
Ahora si, "al viento desplegado" el asunto, la garra en todo su esplendor, ylos 95.000 delirando. El show duro poco mas de 2 horas, hicieron varios bises, alguno mas porque la cantidad de gente asi lo ameritaba.
Lo dificil fue volver a casa. Imaginen una desconcentracion de 95.000 personas. El Pajaro se tomo un colectivo para volver a la city, donde las calles si tienen nombre, pero delante suyo habia unas 5000 personas. Cola de 3 horas mediante, llego, un poquito enojado con la idea de globalizacion bienintencionada que ostenta Bono, pero contento por haber visto un buenisimo espectaculo.